miércoles 16 noviembre, 2016 / Comunicados, Home
APYME alerta sobre el Programa Nacional para la Transformación Productiva
NO SE SALE DE LA RECESIÓN DEJANDO MILES DE EMPRESAS Y TRABAJADORES EN EL CAMINO
En el día de ayer se publicó en el Boletín Oficial la resolución que crea el Programa Nacional para la Transformación Productiva (PNTP), a cargo de los ministerios de Producción y de Trabajo, Empleo y Seguridad Social. Este programa está destinado, según versa la resolución, a “potenciar la productividad y competitividad de las empresas a través de su transformación productiva, otorgando beneficios que tiendan a favorecer el desarrollo integral y armónico de la economía nacional, y a la mejora de la productividad laboral de todos los sectores de la economía”.
La Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (APYME) expresa su fuerte preocupación por la orientación de este programa. Lo que se propicia desde el Gobierno es una suerte de “supervivencia del más apto”, estableciendo cuáles empresas pueden y deben “reconvertirse” mientras el resto queda en el camino. Para ello se establece una alarmante tipología de empresas de “Transformación Productiva”, aquellas que deben reestructurarse o ser absorbida por otra empresa, y “Empresas Dinámicas”, las que según el Gobierno “realizan actividades productivas con capacidad genuina de competir en el mercado interno e internacional y de generar empleos de calidad”.
Esta suerte de “salvavidas” se arroja a las empresas beneficiarias en un marco recesivo, de emergencia laboral y productiva, fruto de las actuales políticas de trasferencias de recursos hacia las empresas concentradas (que por supuesto también serán beneficiarias de este programa). Esto equivale a dictar la sentencia de muerte de las miles de micro, pequeñas y medianas empresas que hoy intentan a duras penas sobrevivir al aumento de insumos, los tarifazos, la caída de ventas en el mercado interno, la importación indiscriminada y el ahogo financiero.
También es alarmante el capítulo del PNTP destinado al empleo. Se otorgan subsidios para facilitar el despido de trabajadores, que ocasionalmente podrán ser tomados por “Empresas dinámicas”, que a su vez dispondrán para ello de un subsidio del Estado durante nueve meses equivalente al máximo de un salario mínimo, vital y móvil. Esto sucede mientras crecen los cierres de empresas, despidos y suspensiones, sin que los ministerios de Producción y Trabajo se esfuercen en impedirlo. Es decir, en lugar de proteger fuentes de trabajo, se propician los despidos y la flexibilización laboral.
Mientras, el Congreso está debatiendo un Presupuesto Nacional que prevé recortes en Ciencia y Tecnología, un fenomenal endeudamiento sin destino productivo y, entre otros ítems, la condonación de una deuda de unos 19.000 millones de pesos a unas pocas empresas distribuidoras de energía eléctrica, que equivale en sí mismo a unos 250.000 salarios mínimos durante un año.
Como en los años ’90, se vuelve a ponderar la “eficiencia” de las empresas, en lugar de planificar el crecimiento industrial y el fortalecimiento del empleo y la demanda. Para este esquema, sobran decenas de miles de empresas y trabajadores. Desde APYME llamamos al conjunto de los sectores de la producción nacional y el trabajo a no avalar estas disposiciones que llevarán una mayor pérdida de empresas y empleos en lugar de reactivar el conjunto de la economía.
Buenos Aires, 16 de noviembre de 2016
Eduardo Fernández
Presidente
Juan José Sisca
Secretario